El Real Madrid ha sacudido el mundo del baloncesto infantil con el fichaje de Moussa Balla Traoré, un prodigio maliense nacido en Bamako que, con solo 11 años y una altura de 2,07 metros, se incorpora al equipo Infantil A de la cantera blanca.
Según la ficha oficial del club, el joven cumplirá 12 años el próximo 24 de octubre de 2025, pero su imponente físico ha generado un torbellino de controversia en redes sociales, donde aficionados, especialmente del Barcelona, han inundado plataformas como X con comentarios irónicos sobre su edad real.
¡SOLO TIENE 11 AÑOS! 🤯
— TNT Sports Argentina (@TNTSportsAR) September 22, 2025
🏀 Moussa Balla Traore nació el 24 de octubre de 2013 en Mali y recientemente fichó por la cantera de Real Madrid Baloncesto.
👉 Jugará el Infantil A con el Merengue. pic.twitter.com/nKSKwN39lO
Frases como "11 años en cada pierna" o "Este era viejo cuando asesinaron a Kennedy" han viralizado la noticia, avivando sospechas de manipulación en los documentos, tal como reporta Cadena SER.
La presentación de Traoré en la web del Real Madrid, con su foto y datos técnicos, ha sido el detonante de esta ola de memes y debates, comparándolo con casos similares de jóvenes africanos en las canteras europeas.
No es un fenómeno aislado: el club catalán rival cuenta con Mohamed Dabone, un burkinabé de 13 años y 2,10 metros que ya ha debutado en amistosos con el primer equipo azulgrana, bajo la atenta mirada de su entrenador Joan Peñarroya.
Ambos representan la creciente tendencia de los grandes clubes españoles a captar talentos africanos a edades tempranas, superando incluso récords como el de Bassala Bagayoko, quien debutó en la ACB con el Fuenlabrada a los 14 años en 2021.
A pesar de las burlas, la inscripción de Traoré es oficial y apunta a un futuro de precocidad en el baloncesto profesional, siempre respetando la normativa que fija los 16 años como mínimo para competir en la Liga.
Todas las miradas se posan ahora en la Minicopa Endesa de febrero de 2026 en Valencia, donde Traoré debutará en un escenario paralelo a la Copa del Rey y se convertirá en el foco de atención por su potencial impacto en la cancha. Este torneo, vitrina para talentos emergentes, servirá de banco de pruebas para evaluar si el 'gigante' maliense puede batir marcas de juventud, al tiempo que reaviva la competencia entre Real Madrid y Barcelona por estos prodigios.
La irrupción de figuras como Traoré y Dabone no solo promete revolucionar el baloncesto español, sino que también invita a reflexionar sobre el equilibrio entre desarrollo físico, ética y oportunidades en un deporte cada vez más globalizado.