La partida de Kevin De Bruyne de Manchester City es inminente, pese a su reciente mejora en el rendimiento. La directiva del club inglés, enfocada en renovar la plantilla, ha decidido no extender el contrato del mediocampista belga, quien será el primero en salir.

Aunque inicialmente se especulaba con un destino en la MLS, el panorama ha cambiado: De Bruyne mantiene un fuerte atractivo en Europa, y la Serie A, específicamente Napoli, emerge como su próximo destino, según confirma el especialista en mercado Sacha Tavolieri.

Napoli, líder de la Serie A y cerca de consagrarse campeón, ha avanzado significativamente en las negociaciones para fichar a De Bruyne. Al belga le seduce la idea de competir en el fútbol italiano, una liga en la que aún no ha jugado, y considera que permanecer en Europa es clave para llegar en óptimas condiciones a su última Copa del Mundo.

Las gestiones han tomado fuerza, con el club presentando su proyecto deportivo y el jugador evaluando la propuesta junto a su familia, apoyado también por la presencia de su compatriota Romelu Lukaku en el equipo.

Un indicio claro del interés mutuo es la reciente visita de la esposa de De Bruyne, Michele Lacroix, a Nápoles, donde se la vio explorando zonas residenciales para elegir una posible vivienda.

Este movimiento refuerza la ventaja de Napoli sobre otros clubes interesados, como Liverpool, Aston Villa, y equipos de la MLS y la Saudi Pro League. Con un contrato de dos años sobre la mesa, que incluiría una posible extensión y un salario menor a los 20 millones de euros anuales que gana actualmente, De Bruyne está a un paso de iniciar una nueva etapa en Italia.