En un giro judicial de alto impacto político, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner recibió el beneficio de la prisión domiciliaria por parte del Tribunal Oral Federal número 2, en el marco de la causa Vialidad, donde fue condenada a seis años de cárcel por corrupción.

La decisión fue tomada por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso, en contra del criterio de los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, que habían solicitado que la condena se cumpla de forma efectiva y en prisión.

Pese a que la fiscalía aseguró que no existían razones humanitarias ni médicas que justificaran un trato diferenciado, el tribunal aceptó el pedido de la defensa alegando la edad de la exmandataria (72 años) y su seguridad personal tras el intento de atentado que sufrió en 2022.

La prisión domiciliaria contempla uso obligatorio de tobillera electrónica y un régimen estricto: Cristina deberá permanecer en su domicilio, no podrá recibir visitas que no estén previamente autorizadas y deberá presentar un listado detallado de convivientes, abogados y médicos.

El fallo también establece que cualquier excepción deberá ser justificada ante el tribunal. Queda prohibido alterar la tranquilidad del vecindario, y cualquier movimiento deberá tener previa autorización judicial.

Así, Cristina no se presentará en Comodoro Py este miércoles, como había anticipado en redes sociales. La notificación del arresto será virtual y eso desactivó parcialmente la movilización que preparaba el PJ para acompañarla.

Mientras tanto, en los tribunales de Retiro se reforzaron las medidas de seguridad ante la tensión creciente. Ya hay vallados, presencia policial reforzada y restricciones internas en el TOF 2.